En París hay siluetas de papel de color negro, vestidas con bañador. Su cintura es tan pequeña que recuerdan a esas figuras de los años 50 de mujeres que casi no podían respirar por el corset que las oprimía. Estéticamente son magníficas. Una figura alza los brazos al cielo, como mostrando su cuerpo, parece que tiene ganas de volar. La otra figura reposa elegantemente sobre un collage de colores. Parece una chica de los años 60, por su peinado y su ropa. Me pregunto qué pensará.